Muelas con secanos, pinares y matorral

El gran dominio paisajístico de "Muelas con secanos, pinares y matorral" se localiza disperso por todo el territorio aragonés en la margen izquierda del río Ebro , de norte a sur y de oeste a este. Destacan la muela de Borja (Campo de Borja); La Muela y La Plana de Zaragoza , separadas por el valle del Huerva; plataformas que aparecen alineadas en las proximidades desde Calatayud hasta Calamocha en la margen derecha del río Jiloca; y las de ambas márgenes del Alfambra. La superficie ocupada por este dominio de paisaje de 615,12 km2, lo cual, supone un 1,29 % del territorio aragonés y se enmarca dentro de las comarcas Andorra-Sierra de Arcos, Bajo Aragón, Bajo Martín, Campo de Belchite, Campo de Borja, Campo de Cariñena, Campo de Daroca, Comunidad de Calatayud, Comunidad de Teruel, Cuencas Mineras, Gúdar-Javalambre, Jiloca, Ribera Baja del Ebro, Tarazona y El Moncayo, Valdejalón y Zaragoza.

Se trata de un paisaje aplataformado que presenta un rango altitudinal amplio que varía desde los 120m hasta los 1.370m, como ejemplo el Cerro de los Rochones con 1.369 m en la comarca Comunidad de Teruel. Esta diferencia de altitudes viene de la mano de la gran variedad de zonas en las que aparece este dominio, siendo la provincia de Teruel, con sus elevadas altitudes medias, la que hace que muchas de estas plataformas estén por encima de los 1.000m de altitud, mientras que las que se encuentran en la Depresión del Ebro tienen sus zonas aplanadas culminantes rondando los 400-500m. La media altitudinal de este dominio está en torno a 800m.

Este dominio de paisaje se caracteriza por la presencia de materiales calizos, en ocasiones intercalados por margas, yesos y lutitas, dispuestos generalmente en estratos horizontales. Se trata de relieves estructurales y plataformas carbonatadas que han quedado en resalte, al tratarse de materiales más resistentes, sobre los espacios de depresión como resultado de la erosión generada por los cursos fluviales.

El paisaje se resuelve en plataformas estructurales resultantes del encajamiento de la red fluvial y en la presencia de grandes escarpes, generados por la resistencia que ofrecen los materiales carbonatados frente a los yesos, margas o lutitas más deleznables. Se pueden observar muelas bien definidas u otras fuertemente erosionadas debido al retroceso de los escarpes originado por la erosión hídrica de los barrancos de incisión lineal asociados. En los bordes son frecuentes la presencia de relieves que recuerdan la mayor amplitud de estas muelas, como los cerros testigo.

Estos relieves están cubiertos, en gran medida, y sobre todo en las zonas aplanadas que los culminan, por tierras de labor en secano mientras que los matorrales esclerófilos y terrenos agrícolas con espacios de vegetación natural y semi-natural son más frecuentes en zonas más degradadas en cuando a su morfología. Es decir, se trata de paisajes topográficamente planos, donde el hombre ha desarrollado una actividad agraria basada en cultivos extensivos, generalmente cerealistas y con presencia de matorral de escaso porte ligado a las duras condiciones edáficas y climáticas para la vegetación presentes en estos espacios. Actualmente, sobre todo en las plataformas que se encuentran en la Depresión del Ebro, es muy frecuente que alberguen importantes campos de aerogeneradores aprovechando el elevado potencial eólico de estas zonas tan expuestas a los vientos dominantes y frecuentes Este dominio alberga núcleos de población generalmente reducidos a excepción del municipio de La Muela, asentamiento cuyo nombre expresa claramente su localización en el dominio que se describe.